viernes, 30 de diciembre de 2016

Descontaminar el mundo

Escribo el post de hoy horas antes de emprender el vuelo a Lima. Espero escribir el del último día del año ya desde la capital peruana. Ayer se vivió en Madrid un día con drásticas restricciones de tráfico. El objetivo era disminuir la fuerte contaminación atmosférica. La medida fue polémica, pero parece que ha logrado algunos resultados. Me pregunto si no se podría hacer algo semejante con la contaminación que padecemos en el mundo de los humanos. Ya sé que para una limpieza total habría que reformatear todo el sistema, pero no está en nuestra mano. Más vale no abandonarse a megalomanías que solo producen frustración. En realidad, la regeneración del sistema es lo que ha hecho Jesús con su encarnación, muerte y resurrección. Pero nos toca a nosotros colaborar para que sus efectos sean más visibles. A la luz del espíritu navideño se me ocurre un pequeño catálogo de medidas anticontaminantes que podrían oxigenar la vida personal y social.
1. Sonríe siempre que te dirijas a alguien. Una sonrisa, cuando sale de dentro, significa reconocer la dignidad de la otra persona y ayuda a crear las condiciones que hacen posible un encuentro. Por favor, no pongas cara de pepinillo en vinagre o de Drácula venido a menos.
2. Escucha antes de hablar. Ponte en el lugar del otro, averigua su estado de ánimo, permite que se exprese con libertad, no tengas prisa en contar lo tuyo. Por favor, no acapares la conversación, no digas eso de "Pues a mí también me pasa".
3. Habla con calma. Procura pronunciar bien las palabras para facilitar la comunicación, deja pequeños espacios de silencio para que las otras personas intervengan. Por favor, no repitas varias veces el mismo mensaje, evita las palabras violentas o groseras. 
4. Reserva varios tiempos de silencio al cabo del día. La contaminación acústica y visual y el exceso verbal te impiden llegar al fondo de ti mismo, aumentan el estrés y te hacen una persona más manipulable. Por favor, no estés todo el santo día en un ambiente ruidoso, no huyas de ti mismo.
5. Cumple con tus obligaciones familiares y laborales de la manera más perfecta posible antes de reclamar tus derechos. Pregúntate con más frecuencia lo que tú tienes que hacer por los demás antes de lo que los demás tienen que hacer por ti. Por favor, no cargues siempre sobre los hombros de los demás lo que te toca a ti.
6. Presta algún servicio a las personas que te rodean antes de irte a la cama. No importa que parezca pequeño o rutinario. Por favor, no vayas por la vida de "señor" exigiendo a todos que te resuelvan los problemas.
7. Alarga los tiempos en los que estás alejado de la televisión y desconectado de internet y del teléfono móvil. Esto te permitirá establecer otras conexiones más humanizadoras. Por favor, no te sientes a la mesa con el móvil sobre el mantel. Es una forma de decir que te importa más el aparato que las personas que están contigo.
8. Imponte un “pequeño impuesto solidario” cada vez que hagas una compra significativa (alimentos, ropa, aparatos electrónicos, etc.); es decir, reserva un pequeño porcentaje de lo que preveías gastar para compartirlo con alguien que lo necesite. Por favor, no gastes por gastar y luego te vuelves tacaño para dar un simple euro.
9. Habla siempre bien de los demás o guarda silencio. Notarás que el ambiente a tu alrededor se hace mucho más respirable. Por favor, no andes difundiendo chismes y entrometiéndote en la vida de los otros.
10. Comprende con serenidad que los demás se cansan y que tú también tienes derecho a descansar. Todo irá mejor si lo haces. Por favor, no te sientas culpable por ello.

Espero no haber sido víctima de esa psicología barata que te promete ser feliz en quince días o promociona las cinco cosas que usted necesita para relajarse. En realidad, este pequeño catálogo contiene medidas al alcance de la mano. Aisladas, pueden pasar desapercibidas. Unidas a las de otras muchas personas, tienen un gran valor anticontaminante. Merece la pena considerarlas al terminar este año 2016 por si pueden convertirse en sugerencias para el próximo 2017. De momento, os dejo con una Oración de Nochevieja y con una canción que nos anima a bendecir, no a maldecir.



1 comentario:

  1. Gracias por tu catálogo de medidas anticontaminantes. Siempre va bien que alguien lo recuerde.
    Buena estancia en Lima.
    Un abrazo

    ResponderEliminar

En este espacio puedes compartir tus opiniones, críticas o sugerencias con toda libertad. No olvides que no estamos en un aula o en un plató de televisión. Este espacio es una tertulia de amigos. Si no tienes ID propio, entra como usuario Anónimo, aunque siempre se agradece saber quién es quién. Si lo deseas, puedes escribir tu nombre al final. Muchas gracias.