jueves, 31 de julio de 2025

Gustar internamente


Termina el mes de julio. Millones de personas se aprestan a comenzar sus vacaciones. Ya se sabe que en Europa el mes de agosto es el mes vacacional por excelencia, aunque las cosas ya no son como hace años. Quizás la pregunta más importante no es dónde vamos a pasar este tiempo de descanso, sino con quién. 

Mientras vivieron mis padres, para mí las vacaciones eran un tiempo para estar con ellos. Lo del lugar no tenía la más mínima importancia. El lugar eran ellos. No me interesaba visitar otros sitios. Me pasaba todo el año viajando de un lugar a otro por varios continentes, así que no tenía necesidad de añadir más a la lista. Mi prioridad era muy clara. 

Ahora las cosas han cambiado un poco, aunque sigo pasando las vacaciones en familia. Restrinjo los viajes al mínimo. Me interesa (por este orden) encontrarme con personas a las que veo solo una vez al año, perderme por el monte, leer, escribir algo y descansar. Sobre todo, descansar.


¿Por qué hay personas que vuelven frustradas de las vacaciones? Imagino que habrá una panoplia de razones. En algunos casos, puede ser el resultado de haber albergado expectativas desmedidas que la realidad no ha satisfecho. En otros, la convivencia intensiva con familiares y amigos puede haber originado malentendidos, suspicacias, dificultades para sincronizar gustos y ritmos, etc. Puede que la frustración nazca también de haber convertido las vacaciones en una montaña rusa de viajes, encuentros, fiestas, etc., sin tiempo para descansar y no hacer nada. Al final, las vacaciones pueden llegar a ser más trabajosas y agotadoras que el ritmo ordinario. 

Con el paso del tiempo, uno aprende a moderar sus deseos y a sacar partido de las cosas pequeñas: una conversación amigable compartiendo un café o una cerveza, un paseo nocturno contemplando las estrellas, una cena con amigos, la lectura sosegada de una novela, etc. Lo importante es realizar todas estas cosas con el máximo de atención, sin prisas, estando a lo que estamos. Cada uno de estos momentos no es un sumando más de una suma interminable, sino una experiencia escogida que merece ser disfrutada. 

Uno de los consejos que da Ignacio de Loyola, cuya fiesta celebramos precisamente hoy, al que va a empezar los ejercicios espirituales es: “No el mucho saber harta y satisface el alma, sino el sentir y gustar de las cosas internamente”. La máxima podría aplicarse perfectamente a las vacaciones. Lo que importa no es acumular viajes, visitas, comidas y fiestas, sino “gustar de las cosas (pocas y escogidas) internamente”.


A lo largo de las próximas semanas intentaré no alejarme demasiado del blog, pero no me marco una periodicidad fija. Todo dependerá del flujo de los días. Si hay algo que me parece interesante contar, lo compartiré con vosotros. Si no, disfrutaré del silencio digital, que también es necesario. 

Cuando recuerdo las vacaciones de otros años, lo primero que me viene a la mente son las conversaciones mantenidas con algunas personas y la profundidad y belleza de las celebraciones litúrgicas. Otras experiencias, interesantes en su momento, han ido perdiendo relieve a medida que pasan los años. 

Vivir el presente con intensidad. Esta podría ser una buena máxima para las vacaciones. Si hablamos, ponemos el corazón en cada palabra. Si escuchamos, nos hacemos todo oídos. Si paseamos, disfrutamos del movimiento y del paisaje. Si participamos en la eucaristía, nos sumergimos en su misterio. Si nadamos, nos hacemos uno con el agua. Si leemos, nos dejamos llevar por la magia de las palabras. 

No se trata de acumular experiencias en una especie de bulimia compulsiva, sino de “gustar las cosas internamente”. Eso es, al final, lo que nos descansa y nos nutre.

1 comentario:

  1. A lo largo de la vida van cambiando las circunstancias que vivimos y como consecuencia nuestras preferencias y necesitamos encontrar algún horizonte que se adapte a las circunstancias del momento.
    Recojo, para este tiempo de vacaciones, dos ideas de las que nos das: “Vivir el presente con intensidad” y “gustar las cosas internamente”…
    Gracias Gonzalo y que tú puedas encontrar el descanso que anhelas en estas vacaciones.

    ResponderEliminar

En este espacio puedes compartir tus opiniones, críticas o sugerencias con toda libertad. No olvides que no estamos en un aula o en un plató de televisión. Este espacio es una tertulia de amigos. Si no tienes ID propio, entra como usuario Anónimo, aunque siempre se agradece saber quién es quién. Si lo deseas, puedes escribir tu nombre al final. Muchas gracias.