La que se avecina

Cuando en agosto de 1991 adquirí mi primer ordenador portátil en Hong Kong no podía imaginar la que se nos venía encima. Aquel Toshiba maravilloso, de color gris perla, con el que escribí miles de páginas, tenía la increíble memoria de 20MB (o sea, lo que ocupan ahora un par de fotos de alta resolución). Le guardo un cariño especial, aunque pronto llegó a su límite porque, en realidad, era un procesador de textos basado en el sistema MS-DOS. Cuando se fue imponiendo el sistema operativo Windows hubo que cambiar. En estos 25 años se ha producido una verdadera revolución en el campo de la informática. Vivimos tiempos de hiperconectividad. Es solo el comienzo de un proceso que no sabemos a dónde nos llevará. 

Ya nada es igual que antes. El mundo digital está liquidando otras formas de hacer y quizá de pensar y sentir, aunque conozco a profesores que todavía siguen defendiéndose con su vieja máquina de escribir Olympia. Es bueno que sobrevivan algunos dinosaurios para recordarnos cómo éramos antes. De esta forma se nos hace más evidente el salto. 

Hace poco, el Foro Económico Mundial ha publicado una investigación titulada «Global Agenda Council on the Future of Software & Society» en la que han participado 800 expertos de todo el mundo. Según ellos, estas son las principales novedades que nos aguardan en los próximos 14 años. Vale la pena leer la lista completa.

1. El 90% de la población tendrá un almacenamiento de datos libre e ilimitado.
2. En 2021 saldrán los primeros robots farmacéuticos.
3. Un trillón de sensores estarán conectados en todo el mundo para el año 2022.
4. El 10% de la población mundial usará ropa conectada.
5. El primer coche producido con impresora 3D llegará en el 2022.
6. El teléfono implantado en el cuerpo en 2023.
7. El primer censo hecho con big data se producirá en 2023.
8. El 10% de las gafas de lectura estará conectado en 2023.
9. El 80% de las personas tendrán acceso a Internet en 2023.
10. En 2023 los gobiernos podrán empezar a cobrar los impuestos a través de blockchain.
11. El 90% de las personas tendrá un superordenador en su bolsillo para 2023.
12. El acceso a Internet se convertirá en un derecho fundamental en 2024.
13. El primer trasplante de hígado impreso en 3D tendrá lugar en 2024.
14. En 2024 más del 50% del tráfico de Internet doméstico estará a cargo de aparatos y dispositivos.
15. El 5% de los productos de consumo será impreso en 3D.
16. El 30% de las auditorías se llevará a cabo con máquinas de inteligencia artificial para el año 2025.
17. Los coches compartidos superarán a los vehículos particulares en 2025.
18. Los coches sin conductor representarán el 10% de todos los coches en los EE.UU. en 2026.
19. La primera máquina equipada con inteligencia artificial se convertirá en miembro de un consejo de administración en 2026.
20. La primera ciudad con más de 50.000 personas y sin semáforos entrará en funcionamiento en 2026.
21. En 2027 el 10% del producto interno bruto mundial pasará a través de tecnología blockchain.

No sé si la secuencia será la prevista o no. Poco importa. Lo que está claro es que nos aguardan grandes novedades que seguirán modificando nuestros hábitos de vida. En esta escalada de conectividad, ¿seremos capaces de conectarnos con nosotros mismos y con la fuente de nuestra identidad o nos iremos mecanizando cada vez más hasta reducirnos a una supermáquina conectada a una red inmensa? ¿Podremos seguir hablando de individuos? ¿Cómo se planteará la cuestión de la inviolabilidad personal? Es necesario que los progresos técnicos sean acompañados por una profunda reflexión ética. De no hacerlo, acabaremos siendo víctimas de nuestros propios inventos. Bueno, ya lo somos en buena medida, pero no queremos darnos cuenta. Se vive bien así. ¿O no tanto?