El conocido tenor
español está un poco cansado de que muchos le digan que, tras un “plácido domingo”, viene siempre un “jodido lunes”. Pero así es como muchas personas ven
el primer día de la semana: como el inicio de un calvario de ocupaciones, prisas,
sinsabores, etc. Yo, sin embargo, disfruto con los lunes. Y también con los
martes, los miércoles, los jueves… Cada día tiene su propio perfil. El lunes es como si
todo se pusiera de nuevo en pie. Me recuerda el comienzo del Génesis. Tras el
descanso sabático-dominical (que tendría que ser un verdadero descanso y no más
de lo mismo), nos tomamos en serio nuestra vocación de creadores y re-creadores. El lunes nos recuerda que hay muchas cosas por hacer, que este mundo es "manifiestamente mejorable". Así que, lo mejor es ponerse cuanto antes manos a la obra, trazarse un sencillo plan de trabajo y ejecutar las cosas una por una.
Ingredientes del desayuno |
El desayuno listo para ser consumido |
Sé que esto es un lujo que
muchos no pueden permitirse. Su desayuno consiste en una taza de café tomada
aprisa, a menudo de pie, o en cualquier otra cosa que encuentran en la cocina. No se
puede esperar nada bueno de un día que comienza de este modo acelerado. Todos
los males vendrán en cadena, jajajaja.
El desayuno me suele ocupar de
7:30 a 8:00 de la mañana. Pero antes de llegar a él han sucedido otras muchas
cosas desde las 5:30 en que me pongo bajo la ducha. (Por cierto, otro día
hablaré de este ritual bautismal). Por lo general, mientras consumo esta “pócima
mágica”, aprovecho para hablar con algún hermano de comunidad un poco rezagado
como yo. Con las baterías físicas, psíquicas y espirituales recargadas, ¿cómo
no afrontar la jornada con entusiasmo?
Por si el post de hoy te ha parecido asquerosamente optimista, te ofrezco un
contrapunto:
Gonzalo, queda claro de donde sacas la energía para ir afrontando todo tu trabajo y tu misión... Con todas las baterías cargadas...
ResponderEliminarUn buen desayuno, de sabor y de cualidades...
Comparto contigo cuando dices que No se puede esperar nada bueno de un día que comienza acelerado.
Gracias por compartirlo.